Prácticas recomendadas para el contenido del ticket de soporte
Por lo general, el contenido de los tickets de TI se organiza siguiendo una estructura básica de datos compuesta por un encabezado y un cuerpo. El encabezado incluye información sobre el solicitante, una breve descripción del problema, los datos de clasificación de los sistemas afectados y las marcas de tiempo utilizadas para calcular los SLA.
Todos estos datos se utilizan para gestionar el ticket a lo largo de su ciclo de vida. La información contenida en el cuerpo del ticket, por el contrario, se utiliza para investigar y resolver la incidencia. Entre esta información se suele incluir: pasos para reproducir, correspondencia del usuario, notas de solución de problemas y acciones realizadas para resolverlo. Es importante diferenciar el contenido del encabezado y el del cuerpo porque cada uno tiene un objetivo distinto en el proceso de gestión.
Campos de datos individuales vs. Notas sin formato
Un problema habitual al que se enfrentan las empresas a la hora de diseñar sus sistemas de gestión de tickets de TI es determinar qué datos recopilar en los campos dedicados a los tickets y cuáles capturar en los campos de texto sin formato (notas). Los primeros son más fáciles de utilizar para realizar análisis, generar informes e impulsar las reglas de automatización del flujo de trabajo, pero completarlos requiere mucho más tiempo.
Las prácticas recomendadas sugieren que los campos de datos especializados son los más apropiados para los datos del encabezado, que normalmente solo se recopilan una vez (no se actualizan con frecuencia), así como para los datos generados por el sistema (por ejemplo, las marcas de tiempo).
Dado que los datos del encabezado son los que se suelen utilizar para la priorización de colas, las reglas de enrutamiento y los informes, disponer de campos de datos individuales facilita significativamente estas tareas. Los campos de texto sin formato, que permiten copiar y pegar grandes bloques de texto, son más adecuados para los datos de diagnóstico, las interacciones del usuario y las notas de resolución de problemas que se encuentran en el cuerpo del ticket.
Vistas del agente y el solicitante
Una práctica recomendada para la generación de tickets de soporte técnico es proporcionar distintas vistas de los datos de los tickets. A menudo, hay información técnica detallada, notas de resolución de problemas y datos potencialmente confidenciales (como problemas conocidos y fallos de seguridad) que se registran como parte de las notas del agente en los tickets de TI.
Estos datos no están destinados al solicitante ni a ninguna otra persona que no pertenezca al equipo de mantenimiento y soporte. Las vistas de tickets de los solicitantes deben contener información altamente organizada, editada y formateada que brinde claridad y evite crear una confusión adicional.
Se recomienda también que las notas de los agentes y las comunicaciones con los solicitantes se gestionen en campos individuales dentro del cuerpo del ticket, a fin de evitar que los datos se divulguen de forma involuntaria.
Clasificación de tickets de soporte técnico
La clasificación constituye una parte importante de los procesos modernos de la generación de tickets. Los datos de clasificación se utilizan para establecer las expectativas de los SLA, asignar tickets a los equipos de soporte adecuados y agruparlos con fines de análisis y generación de informes.
La automatización del flujo de trabajo basada en reglas utiliza los datos de clasificación de tickets como herramienta clave para mejorar la eficacia de los procesos de soporte. Son 4 los elementos clave que se deben incluir en la clasificación:
- Tipo: evento, alerta, incidencia, solicitud o pregunta
- Fuente: sistema, usuario o agente que ha generado el ticket
- Prioridad: prioridad asignada del sistema, proceso comercial o actividad relacionada con el ticket
- Gravedad: calificación de la sensibilidad temporal, impacto empresarial y urgencia del problema
Es importante clasificar los tickets con precisión y coherencia para que reciban el nivel de atención adecuado por parte del equipo de soporte, a fin de garantizar que los problemas más importantes para la empresa se aborden primero.